
Inflación en Perú se acelera a 2.3% en junio
- Tasa anual de inflación en Lima aceleró a 2.3% en junio 2024, superando el 2% previo.
- Sectores transporte y vivienda impulsaron aumento; caída en alimentos moderada.
- IPC mensual aumentó 0.12%, resaltando la importancia del monitoreo para la estabilidad económica.
La tasa anual de inflación en Lima, capital de Perú, se aceleró a 2.3%, en junio tras tres meses seguidos de desinflación, situándose en el rango objetivo del banco central del 1% al 3%.
Impulsores del aumento
Copy link to sectionLos precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas se moderaron (-0.56% comparado con -1.86%), mientras que los aumentos más rápidos en el transporte (4.45% comparado con 3.97% en mayo).
Por otro lado, la vivienda y los servicios públicos (1.68% comparado con 1.51%) contribuyeron a este repunte. Además, los precios de los hoteles y restaurantes disminuyeron ligeramente a 4.24% desde el 4.77% en mayo.
Variación mensual del IPC en Lima
Copy link to sectionSegún datos del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), el Índice de Precios al Consumidor (IPC) experimentó un aumento mensual del 0.12%, después de una disminución del 0.09% en el mes anterior.
La tasa de inflación en Lima ha experimentado un ligero aumento debido a la dinámica cambiante de los precios en la zona y su impacto en la economía local.
Igualmente, es fundamental vigilar de cerca estos indicadores para evaluar la estabilidad económica y tomar decisiones informadas en materia de política monetaria y fiscal.
Impacto de la inflación en hogares y empresas en Perú
Copy link to sectionTanto los hogares como las empresas se ven muy afectados por la inflación. Los hogares se ven obligados a invertir más recursos para comprar bienes y servicios esenciales debido al aumento de los precios.
Además, la pérdida de valor de los ahorros y las dificultades en la planificación financiera a largo plazo generan incertidumbre y desafíos en la gestión de ingresos y gastos futuros.
Por otro lado, los costos de producción aumentan, especialmente los de materias primas y la mano de obra, lo que puede afectar los márgenes de ganancia y la rentabilidad.
En un entorno inflacionario, la fijación de precios se vuelve más complicada y requiere ajustes frecuentes para mantener la competitividad.
Además, la volatilidad asociada con la inflación puede tener un impacto negativo en las inversiones a largo plazo, lo que puede tener un impacto negativo en el crecimiento y la expansión de las empresas.
Para reducir los efectos de la inflación en sus finanzas y operaciones, ambos sectores deben comprender y administrar sus efectos.